La casa es una típica casona de la Sierra de Guadalajara, con su característica
fachada de piedra y ladrillo y sus estrechos balcones en el piso superior.
Se encuentra situada en el centro histórico de Arbancón, rodeada de otros
edificios típicos de la zona. Aquí estaba antiguamente la tienda del pueblo,
donde, entre otras cosas, se vendía el pan de la tahona situada justo enfrente.
De ahí su nombre y la costumbre que tengo de recibir a mis huéspedes con un pan
redondo tradicional y un saquito de sal, uso que se remonta a los tiempos romanos.
A pesar de haber sido totalmente modernizada y contar con todas las comodidades
necesarias para ofreceros una estancia lo más agradable posible,
ha conservado todo su acogedor estilo tradicional.
Está plenamente acondicionada para residir en ella durante todas
las estaciones del año. Tanto os sorprenderá el frescor que sus recios muros
mantienen en su interior durante el verano, como el calor hogareño que en
invierno os regalará su generosa chimenea alimentada con madera de roble de la dehesa.
Por supuesto dispone de calefacción central en todas las habitaciones y agua
caliente en los cuartos de baño, de cuyo uso responsable por vuestra parte no
me permito dudar.
La casona dispone de seis dormitorios, cuatro cuartos de baño, una sala de
estar con chimenea, comedor, cocina totalmente equipada, un porche con tejado
tradicional para disfrutar del fresco de la noche y un amplio patio cerrado
con barbacoa donde pequeños y mayores podrán corretear a sus anchas.
Esta combinación de amplios espacios comunitarios y recogidas zonas privadas
convierte a la casa en alojamiento ideal para reuniones familiares,
grupos de negocios o encuentros entre amigos,
en las que podréis disfrutar con las actividades en grupo
sin tener que renunciar a vuestra esfera privada.
Si necesitáis la completa relación de prestaciones, asi como si deseáis
contratar alguna suplementaria no dudéis en consultarme.
Ya hemos mencionado la cocina completamente equipada y la barbacoa, en las que
cómodamente podréis preparar vuestras especialidades culinarias,
pero si no os apetece
cocinar, el pueblo y sus alrededores os ofertan una excelente constelación
gastronómica, con especialidades locales entre las que destaca el legendario
cabrito al horno con breve, una exquisita salsa de Arbancón a base de hierbas
naturales de receta secreta, celosamente guardada por generaciones. Los
establecimiento locales también os preparán estas y otras delicadezas por
encargo, para que podáis desgustarlas tranquilamente en la casa.
En resumen, os he preparado la casa que a mí me gustaría habitar, con esmero,
con cariño, cuidando el detalle y espero que
os agrade tanto como a mí.